anunciaron que desde el Ministerio Agricultura que conduce Julián Domínguez, se impulsa la creación de un canon sobre la semilla reservada para “uso propio”, de pago obligatorio, para “compensar» a las corporaciones semilleras por el legal ejercicio de este derecho. Para Antonio Aracre, CEO de Syngenta, se trataría del “anuncio más importante y disruptivo de los últimos 20 años para el futuro del Agro en Argentina”. Si esto avanza, será clave la capacidad de reacción de las organizaciones populares y el grado de articulación que se pueda construir para, una vez más, resistir los intentos por eliminar derechos y apropiarse de las semillas, que son patrimonio de todos y todas. Por Huerquen.
Cada bocado que damos los casi 8.000 millones de seres humanos, empieza con una semilla. Mientras a nivel mundial la población se urbaniza cada vez más, el vínculo íntimo que los pueblos tenemos con las semillas se va haciendo cada vez más difuso; y en esa opacidad aparente opera un puñado de corporaciones trasnacionales para apropiarse de ellas.
Hablar de semillas es hablar de la base de todo sistema agroalimentario y agroindustrial. En esa centralidad radica su condición estratégica, y las transforma en terreno de feroz disputa a nivel mundial entre proyectos que son esencialmente antagónicos: el del Agronegocio que busca controlar el conjunto del sistema para maximizar ganancias, apropiándose no sólo del valor del trabajo sino de bienes comunes como las semillas; y el paradigma de la Soberanía Alimentaria, que busca garantizar el derecho de los pueblos a decidir qué alimentos producir, bajo qué condiciones y procesos, y plantearse lógicas propias de distribución y consumo. Y ese derecho sólo se puede ejercer con semillas en las manos de quienes han sido desde siempre las y los grandes protagonistas de la epopeya de la alimentación.
...
Más:
https://www.anred.org/2022/07/26/defender-las-semillas-una-vez-mas/
No hay comentarios:
Publicar un comentario