En julio de 2023, la Comisión Europea propuso desregular una amplia gama de plantas creadas mediante técnicas genéticas novedosas. Sin embargo, los Estados miembros de la Unión Europea (UE) no se han unido a esta idea, lo que ha paralizado su avance.
“Las soluciones tecnológicas, como los cultivos modificados genéticamente, son especialmente atractivas porque prometen ofrecernos un atajo: una forma de abordar el cambio climático sin tener que afrontar los difíciles retos económicos y políticos que conllevan las soluciones reales. Por desgracia, estos atajos a menudo resultan ser falsas promesas”, explicó a Metro Anneleen Kenis, profesora de ecología política y justicia medioambiental en la Universidad Brunel de Londres.
...
Más:
No hay comentarios:
Publicar un comentario