viernes, 6 de diciembre de 2013

Gringos afectados por comidas con transgénicos


06/12/13.- Los alimentos genéticamente modificados, como la soja y el maíz, pueden ser desencadenantes de una serie de desórdenes intestinales, relacionados con el gluten, que afectan a 18 millones de estadounidenses, sugiere una reciente investigación.
El informe fue publicado por el Instituto de Tecnología Responsable (Institute for Responsible Technology, IRT) y cita datos autorizados del Departamento de Agricultura de EEUU y los registros de la Agencia de Protección Ambiental de ese país, así como varias publicaciones de revistas médicas y resultados de indagaciones internacionales sobre el asunto.
“La sensibilidad al gluten puede variar en gravedad: desde una leve molestia hasta una enfermedad celíaca, un grave trastorno autoinmune que, si no es diagnosticado, puede aumentar en cuatro veces la tasa de mortalidad”, dijo Jeffrey M. Smith, director ejecutivo del IRT, en un comunicado difundido en su página web.

Smith afirmó que en soja, maíz, algodón, canola, azúcar de remolacha azucarera, calabacín, calabaza amarilla, papaya hawaiana y alfalfa, “la toxina Bt (Bacillus thuringiensis), el glifosato y otros componentes de los organismos genéticamente modificados (OMG) están relacionados con 5 condiciones que pueden iniciar o exacerbar los trastornos relacionados con el gluten”.
AGUJEROS EN CÉLULAS
Es precisamente la toxina Bt, presente en los alimentos OMG, la que mata a los insectos “perforando agujeros en sus células”. La toxina está presente en “cada núcleo” de maíz y sobrevive al proceso de la digestión humana, además de que, de acuerdo con un estudio del año pasado, también es capaz de horadar agujeros en las células humanas.
Según el informe, los daños relacionados con los OMG se dividen en cinco áreas: la permeabilidad intestinal, las bacterias desequilibradas del intestino, la activación inmune y la respuesta alérgica, problemas de digestión y daños a la pared intestinal.
REDUCE BACTERIAS INTESTINALES BUENAS
El IRT también indica que el glifosato, un herbicida comercializado bajo el nombre de Roundup, tiene un impacto negativo en las bacterias intestinales. Los cultivos transgénicos contienen altos niveles de la toxina.
“Incluso con una exposición mínima, el glifosato puede reducir la población de bacterias intestinales beneficiosas y promover el crecimiento excesivo de las cepas nocivas”, se asegura en el trabajo.
Tom O’Bryan, experto en sensibilidad al gluten y en la enfermedad celíaca, opina que la inserción de los OMG muy probablemente puede “explicar el rápido aumento de los trastornos relacionados con el gluten en los últimos 17 años”.
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China rechazó carga de EEUU
China anunció ayer que devolvió a Estados Unidos 120 mil 643 toneladas de maíz importado desde ese país por contener cantidades de un tipo de ese cereal con modificaciones genéticas desaprobadas por las regulaciones nacionales.
Según la Administración General de Supervisión de la Calidad, Inspección y Cuarentena (Agscic), el maíz tipo MIR 162 fue hallado en cargamentos provenientes de Estados Unidos, en la portuaria ciudad sureña de Shenzhen, así como en las provincias de Fujian y Shandong.
La variedad MIR 162 no cuenta con la autorización del departamento de agricultura de China, aseveró PL.

http://www.ciudadccs.org.ve/?p=510609

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