Por Darío Aranda
El
Celma cuestionó que en el dictamen aprobatorio, por parte del Senasa,
interviniera un científico con “conflicto de intereses”, Moisés
Burachik. “Ha sido miembro asesor de una asociación internacional de la
cual Monsanto es parte”, afirmó el Celma. Burachik es reconocido en el
mundo científico como un férreo impulsor de los organismos genéticamente
modificados. En la actualidad es director de Asuntos Regulatorios de
Bioceres, empresa dedicada al desarrollo de semillas transgénicas, cuyo
directorio está conformado (entre otros) por Víctor Trucco (presidente
honorario de Aapresid, empresarios impulsores de agronegocios) y Gustavo
Grobocopatel (presidente de Los Grobo, uno de los mayores pools de
siembra del continente).
Burachik es socio honorario de ILSI (Instituto Internacional de Ciencias de la Vida), que tiene entre sus socios directos a las multinacionales de agroquímicos y transgénicos Bayer, Dow Agro Sciences, Syngenta y Monsanto.
“Los integrantes de la Conabia, Dirección de Biotecnología y Senasa deben ser los expertos por el Estado que deben tener una postura neutra en la aprobación de los organismos vegetales genéticamente modificados. Pero la realidad muestra que están estrechamente vinculados con una organización internacional como ILSI, que en todos sus documentos y actividades surge un claro interés en propugnar una santificación de los transgénicos”, denunció el abogado.
http://www.pagina12.com.ar/diario/sociedad/subnotas/3-64913-2013-09-05.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario