La revista científica Toxicology publica estudios de la universidad
francesa de Caen que demuestran las necrosis que causan los tóxicos del
maíz y la soja transgénicos en las células de nuestros órganos
digestivos y reproductivos. Estos estudios evidencian que tóxicos de los
transgénicos, como el Ry1Ab y el POE-15, entraron en la cadena
alimentaria en 1996 sin haber pasado ningún control sanitario que
detectara sus devastadores efectos, y ponen en entredicho nuestra
seguridad alimentaria. También se explica, gracias a estos estudios, por
qué los que nos hemos intoxicado con maíz y soja transgénicos sufrimos
sus efectos en el más absoluto desamparo médico: en las consultas, no se
nos analizan sus tóxicos ni se nos diagnostica su causalidad. Con un
sistema sanitario que ignora dichos tóxicos y sus efectos en nuestro
organismo, esos transgénicos nos destruyen la vida de forma inédita,
clandestina e impune.
Fuente:
http://www.elperiodico.com/es/cartas/entre-todos/transgenicos-toxicos-que-matan/76504.shtml
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