El
Premio Nobel de la Paz anunció la creación de un tribunal penal
internacional en medio ambiente. Cuestionó la megaminería, el fracking,
la desertificación, el acuerdo del gobierno con Monsanto y las semillas
transgénicas.
El premio Nobel de la
Paz, Adolfo Pérez Esquivel, dijo que “el problema ambiental
tiene que ver con los derechos humanos”, y adelantó que a nivel internacional
se está trabajando en la creación de un tribunal penal para asuntos del medio
ambiente.
En una brillante alocución sobre el medio ambiente, Pérez
Esquivel dijo que “tenemos este pequeño planeta llamado tierra que es nuestra
casa común. Si destruimos nuestra casa, todo lo otro es ciencia ficción”, y
criticó la megaminería, el fracking, la desertificación, el acuerdo del gobierno
argentino con Monsanto y las semillas transgénicas.
Además, aseguró que para lograr la soberanía argentina, el
gobierno no debe apoyar a las multinacionales, sino a los pequeños y medianos
productores.
*TEXTUAL
Pérez Esquivel disertó en la noche del viernes en el Centro
Sirio Libanés, en el marco de la presentación del libro de Darío Lonardi sobre
la vida de Aurora Fraccarolli, referente de las Madres de Plaza de Mayo.
Ante una pregunta final del ambientalista Horacio Claret
sobre el medio ambiente, Pérez Esquivel respondió de la siguiente forma.
Dada la importancia y la claridad de sus conceptos, los
publicamos en forma textual:
El problema ambiental tiene que ver con los derechos
humanos. El derecho de los pueblos, nosotros trabajamos eso como derecho de los
pueblos. Ustedes aquí recibieron la visita de Marcelo Conti, que vino desde
Italia. Cuando el problema de Botnia, que todavía lo tienen, pedí a Academia de
Ciencias de Venecia, que se lo encargó a la Universidad de la Sapienza para trabajar
con el tema de la contaminación. Eso se hizo, lógicamente que los gobiernos de
Argentina y Uruguay todavía siguen con ese problema. Estamos trabajando mucho
sobre el problema ambiental, el Servicio Paz y Justicia y otras organizaciones.
Uno, la megaminería, la contaminación enorme de la
megaminería y la destrucción del medio ambiente.
Otro los monocultivos y el glifosato y los daños que está
provocando. Pero ustedes saben que el gobierno argentino hizo un acuerdo con
Monsanto, que en este momento se está instalando en Córdoba. Hay resistencia en
la localidad de Malvinas Argentina y hay amenazas a los pobladores que se
resisten a eso.
El otro tema que estamos trabajando es el fracking. Es
romper la roca madre. Se utilizan miles de litros de agua que quedan totalmente
contaminados.
Ahora…aquí se privilegia el capital financiero por sobre la
vida del pueblo. Ya hay serios problemas de malformaciones en los nacimientos
de los niños en zonas contaminadas.
Estamos tratando de hacer eso. Yo fui presidente de la Academia de Ciencias en
Venecia, que en estos momentos está reunida con el Parlamento Europeo. Es una
reunión de juristas. Están trabajando en la creación del tribunal penal
internacional sobre el medio ambiente. Venimos trabajando en varias líneas no
sólo en la Argentina,
sino en otros países. El problema del Ecuador, donde se escapa y no respeta al
tribunal del Ecuador, que además está explotando en Vaca Muerta, en Neuquén.
Tenemos un largo camino por recorrer. Tenemos este pequeño
planeta llamado tierra que es nuestra casa común. Si destruimos nuestra casa,
todo lo otro es ciencia ficción. Hemos trabajado bastante en Naciones Unidas
sobre el aumento de la desertificación. Cada día hay menos tierra cultivable y
hay más desierto.
Lo otro que hay que temer, y hablo de Monsanto, son las
semillas transgénicas. Algunos estamos trabajando sobre los bancos de semillas
para recuperar las semillas naturales, que tienen una transformación natural.
Pero las semillas transgénicas no tienen memoria, sirven para un cultivo pero
no sirven para otro cultivo. Y esto genera la dependencia que tienen que volver
a comprar a la misma empresa, como Monsanto, la semilla. Esto vale en la soja,
en el maíz, en el trigo. Hace pocos días estuve en México. En México, donde nacieron los hombres y
mujeres de maíz, tienen que comprar las semillas transgénicas a Estados Unidos. Esta es la dependencia alimentaria. Por favor,
uno de los grandes desafíos que tenemos es la soberanía alimentaria. La
soberanía alimentaria no viene por las grandes corporaciones. La soberanía
alimentaria del mundo está en manos del mediano y pequeño productor rural, hay
que protegerlos…
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